Para que los conocimientos pudiesen ser admitidos y difundidos dentro de la cultura islámica, dichos conocimientos caracterizados como foráneos y de base racional, escritos con otra lógica y en otro idioma, debieron pasar por una especie de "tamiz" que los hiciera adecuados para su posterior difusión.
Entre los obstáculos presentados a las ciencias foráneas en un intento por ingresar al pensamiento islámico, hay que destacar que los propios musulmanes dividían el saber en dos categorías: el tradicional (basado en las enseñanzas brindadas por el Corán, apoyadas en la autoridad divina y enseñadas oralmente), y el foráneo o racional (su transmisión debía ser de forma escrita ya que su origen era más humano que divino, debían ser aprehendidas por la razón y no por la tradición o la autoridad, y además podía ser sometido a crítica y corrección). La verdad es que, muchas ciencias extranjeras fueron vistas, desde sectores conservadores, como una amenaza. A causa de lo anterior, sostiene el autor, la ciencia estuvo lejos de ocupar un lugar central dentro del Islam ya que había fuerzas que tendían a marginar las ciencias foráneas. La educación islámica en sí no hizo nada para prohibir las ciencias foráneas, pero tampoco las apoyó lo suficiente; un claro ejemplo de esto era la falta de una institución o universidad que permitiera que el saber griego se resguardase. Esto colabora a la hora de comprender por qué se da el declive de la ciencia islámica en los siglos XIII y XIV. De esta forma, se demuestra cómo en un principio el desarrollo científico no colisionó con lo religioso, sin embargo, las cosas cambiaron cuando se inicia la expansión musulmana. Desde ese momento, la ciencia comienza a estar al servicio de la fe, esto se agrava ante la caída de Bagdad y el avance dos categorías el fanatismo religioso. Durante los siglos SXIII, SXIV y SXV, muchas obras fueron guardadas y otras descartadas. En consecuencia, se procede al opacamiento de la ciencia musulmana frente al renacimiento del saber europeo.
Los musulmanes entraron en la tradición científica occidental y se convirtieron en científicos y filósofos naturales gracias a su conversión en discípulos de los griegos. ¿Qué significa ser discípulo en Ciencia? En primer lugar, en el discipulado radica la verdadera empresa científica. Los musulmanes se convirtieron en científicos no repudiando la tradición científica existente, sino uniéndose a ella, convirtiéndose en discípulos de la tradición científica más avanzada que jamás había existido en la historia de la humanidad. La ciencia musulmana se construyó sobre los cimientos griegos y se desarrolló según los principios arquitectónicos griegos.
En fin, la cultura islámica completó el proyecto griego. Dicha comunidad científica, expresó la originalidad y la innovación a través de la corrección, extensión, articulación y aplicación del marco existente; tal es la forma en la que procede la ciencia moderna, es decir, corrige, extiende y aplica principios científicos heredados. (LA CIENCIA DEL ISLAM, DE DAVID C. LINDBERG)
